La palabra dios, se ha convertido en una palabra de gran influencia en bastos sectores de la población, debido al “supuestamente” carácter mágico, perfecto y todopoderoso” que le han atribuido grupos de personas misantrópicas que con ambición de poder han llegado a los niveles más bajos y sucios que pueda llegar el ser humano; la palabra “dios” por la connotación que ha llegado a tener, se ha convertido en el término más peligroso que pueda existir en el la historia de la humanidad, puesto que sólo utilizar este término puede despertar grandes pasiones (como en el presente caso) ya que la “corrupción organizada y religiosa” puede utilizar el término dios para hacer daño y mantener de esa manera el poder mal habido que mantienen y que pretenden y pretendrán mantener y perpetuarlo por los siglos de los siglos, y que no podrán lograrlo debido al desarrollo de la ciencia y filosofía ateas que poco a poco va logrando conocer la ansiada VERDAD, fin último del conocimiento humano y ateo.
El término dios, es sólo ello, palabra o término como piojo, culebra, delincuente, cama, heces, etc. La diferencia está en que el término dios a diferencia de los términos que he mencionado, es que en lo fáctico nunca ha existido, no existe, ni existirá, es decir, solamente existe como término o concepto, como palabra “dios”, es por ello que podemos observarlo, es decir, cuando yo digo o escribo la palabra dios me refiero a ese término o concepto como término o concepto y no como un dios verdadero ni humano ni divino, pues lo verdadero es que dios sólo es un concepto o término y nada más. A diferencia del término Caballo, por ejemplo, es que caballo no solamente es concepto sino es existencia real, pues es un animal con cuatro patas que come y orina, que siente alegría y tristeza, siente calor, frío y sed, etc, mientras que el término dios es sólo término, es decir ni es animal, ni vegetal, ni mineral, no es un término ni frío, ni tibio, ni caliente, dios es un término inflado y forzadamente divinizado como se ha dicho por mentes delincuenciales que lucran a costillas del mencionado término, es decir dios.
A dios se le ha atribuido supuestas facultades de amor, algunos sujetos han acuñado muchas frases entre las que destaca es: dios es amor (quisieron que el término dios sea sinónimo de amor, claro que no, dios no es sinónimo de amor) que por supuesto se ha generalizado, pero no por ello es cierto, porque dios no es ni amor ni es odio, porque también se puede afirmar por ejemplo: dios es odio, dios es piojo, dios es vacío, dios es mujer, dios es homosexual, dios es … etc. yo puedo analizar el término “dios es odio” y puedo decir que dios castiga a sus propios hijos si se portan mal o bien, entonces, molesto manda terremotos, maremotos con miles y miles de muertos, entonces puedo afirmar ese dios, es un Dios malo y odioso que goza matando a sus hijos, pero no, yo no puedo ni debo utilizar a este pobre “término dios”, pues sólo es un término y nada más, pues no puedo darle facultades de maldad o bondad a este simple “término dios” pues es un concepto sin ningún poder, al menos cuando molesto al Caballo me puede patear, pero este insignificante término dios no puede hacerme nada, absolutamente nada. Pero los que si me pueden atacar son aquellos delincuentes que lucran con este término y ven peligrar el poder mal habido que aún tienen.
En el INTERNET un término que me llamó la atención fue “dios es Ateo”, lógicamente yo me reí de tanta creatividad, entonces el término “dios es Ateo” también es sólo una afirmación falsa o proposición falsa. Para algunos puede ser una afirmación verdadera o paradójica, pero bien analizado y a la luz de la razón, es una proposición falsa, porque dios, repito una vez más existe sólo como término lingüístico y nada más.
La frase “dios ha muerto” del gran Doctor Federico Nietzsche, generó una reacción de la corrupción religiosa y fue atacado, debe entenderse esta proposición sólo metafóricamente y nada más, sólo que quisieron que esta palabra dios nunca entre al análisis racional, pero como pueden ver ahora, lo podemos analizar pese a las limitaciones que impone la corrupción religiosa.
El término dios por el machismo que existe en la humanidad es más importante que el término diosa, o sea que hay más dioses que diosas con riqueza (propiedades, cursos en la educación, altos sueldos y exoneración de impuestos) mal habida y conseguida por sus “supuestos” hijos e hijas a golpe de intrigas y maldad y ello no debe continuar.
Ahhhh, dios, es un término que legaliza, incluso, legitima la corrupción religiosa, porque las religiones tienen que tener sino uno o varios dioses o diosas de manera obligatoria para aglutinar o cohesionar personas y luego de robarles la razón e imponerles la mentira más despreciable y fuerte, cobrarles por los servicios, ¡pero que servicios! Misas, cultos, oraciones, matrimonios, misas de salud, etc.
Que quede claro, yo no tengo ni odio ni amor al término dios, y yo no odio al término dios ni amo al término dios, porque no puedo odiar ni amar a un término simple como dios, yo crítico y me molesta que gente inescrupulosa utilice el término dios para tener “poder” y siga estafando y engañando impunemente a nuestra gente, con el visto bueno de políticos corruptos que reconocen sueldos altos a un sector de personas especializadas para engañar y sembrar odio entre hermanos y paisanos y para ello utilizan el concepto dios. ¿Por qué? porque no pueden ganar dinero limpiamente, sino con trampas y haciendo el mal entre nosotros los hombres.
El término dios, es un término que atenta contra la “búsqueda perfección del hombre” o mejor ¡atenta contra la esencia y perfección del hombre!, allí nos han sembrado el cuento de que el único perfecto es el término dios, ja,ja,ja, pero no, no es cierto. Para que el hombre llegue a la esperada perfección, previamente debe vencer al supuesto dios todo poderoso y concebirlo en su real dimensión: es decir como simple término, pues el término Dios es un obstáculo para conseguir perfección del hombre, sólo serán perfectos los hombres y las sociedades que se liberen de sus tradiciones y creencias religiosas y del término dios, porque siempre te dirán que el único que es perfecto y puede ser perfecto es el término dios, pero no es así y es totalmente falso, ya que nosotros (nuestra especie llegará inevitablemente a la perfección y el concepto dios será sólo un término del diccionario conceptualizado en su real dimensión y sin los falsos atributos celestiales y terrenales puestos por traficantes de mentes y tesoros).
Yo como ciudadano y como ateo tengo la obligación racional y moral de apoyar con un granito de arena a que el hombre llegue a la perfección, yo escribo porque busco a que nuestra especie llegue a la perfección, (para mi es cómodo someterme a cualquier religión y evitarme problemas y críticas y no escribir ni reflexionar), pero en dicha búsqueda me tropiezo con el término dios y con los vicios de la sociedad, mejor dicho el término dios se ha convertido en un vicio para la razón, así como el alcoholismo, la drogadicción, etc. estos vicios atentan con la búsqueda y el logro de la perfección, lógicamente, las religiones atentan contra la esencia del hombre, por lo que no puedo dejar de pronunciarme y reflexionar ya que los vicios como el alcoholismo, la drogadicción, la religión y dios, etc, hacen que la sociedad agonice y se encuentre en decadencia pues corrompen a la sociedad. Pero aún así y comparativamente el término dios es el vicio más peligroso para las mentes y las sociedades.
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